Su capacidad de acción se debe a su fuerza vitalizante, depurativa y luminosa, haciendo más fluctuante nuestra fuerza energética. Al hacerlo, irradia todas las demás piedras y nuestra aura con luz.
Su capacidad de acción se debe a su fuerza vitalizante, depurativa y luminosa, haciendo más fluctuante nuestra fuerza energética. Al hacerlo, irradia todas las demás piedras y nuestra aura con luz.